Todos hemos sido
atraídos por los vampiros alguna vez en nuestras vidas, ya sea por películas o
libros, el tema es interesante y ha llegado a apasionar de manera extrema a
muchas personas. Más allá de los cientos de leyendas que existen sobre vampiros
reales
y la sed de sangre que tienen, encontramos un par de casos en lo que ahora se
conoce como Serbia (Pequeño país que se encuentra en la extinta Yugoslavia),
tanto Peter Plogojowitz, Ruža Vlajna como Arnold Paole son 3 historias que podrían dejarnos pensando en
la existencia de estos seres fantásticos. El caso de Peter Plogojowitz, inicia –
hasta cierto punto- la oleada de leyendas sobre vampiros reales en toda Europa
del Este.
Peter Plogojowitz
Se cuenta que Peter Plogojowitz murió a los 62 años en 1725, en la aldea
de Kisilovia en el distrito de Rahm (lo que hoy es Eslovenia). 4 días después
de que muriera, se presento en su casa pidiendo algo de cenar, su hijo le dio
algo de comida, después de comer, se fue.
Los 2 días siguientes, regreso a pedir de comer pero su hijo se negó, al
otro día, el hijo de Peter, apareció muerto.
Algunos lugareños presentaban pérdidas considerables de sangre, además
de 10 vecinos aparecieron muertos, después de padecer alguna enfermedad breve,
qué, durante su agonía juraron que el Vampiro los había visitado. La viuda
de Plogojowitz, juro que su marido había regresado a su casa exigiendo sus
zapatos, todos dijeron lo mismo, se veía como cadáver fresco.
Dado que este suceso se dio en los primeros años del siglo XVIII, nos
tenemos que ubicar en Prusia, los oficiales tuvieron que poner orden con todo
el borlote que se armo con la racha de las muertes, pero sobre todo cuando
desenterraron el cuerpo de Peter Plogojowitz, no había algún tipo de indicio de
que haya fallecido, no había olor, el cadáver no había entrado si quiera en
rigor mortis, y había sangre fresca en la boca, quizá todo sea un chisme de algún
gracioso, pero está asentado en documentos que así se encontró el cadáver.
Los habitantes del pequeño pueblo, llenos de rabia, mandaron a una persona después de afilar una
estaca de madera, que fue brutalmente hundida en el corazón, del cual surgió abundante sangre fresca, así
como de sus oídos y de su boca, mientras el cuerpo se sacudía y movía. Luego lo
quemaron hasta reducirlo a cenizas. Después de esto, las muertes de los
inquilinos del pueblo cesaron.
El informe oficial de este caso fue firmado en
Viena por Frombald, Oficial Imperial de Gradiska, el 31 de julio de 1725, se
tiene conocimiento que este informe es el primer documento en el que aparece la
palabra vampiro, en la forma vampiry. Dicho informe, se encuentra
en un tipo de copia en las páginas 11 y 12 del ejemplar del Das
Wienerisches Diarium (El Diario de Viena), publicado en Viena el 21 de
Julio de 1725.
En la actualidad
Kisiljevo es una población de Serbia con 704 habitantes (censo del año 2002),
situada en el distrito de Braničevo, en el municipio de Veliko Gradište, y se
sigue hablando de la existencia de vampiros, día tras día.